jueves, 15 de septiembre de 2011

Carlos Leal: voz y potencia

Cuando lo vieron por primera vez parado en las tablas del teatro, nadie se imaginaba, y nadie esperaba, lo que se venia. Pero lo que vino fue una sorpresa. Carlos Leal, estudiante de once, sorprendió al publico con su voz, un tanto potente, un tanto melodiosa, y dejo a más de uno con la boca abierta.

"Toda la vida me ha gustado la música". Y así es, eso lo ha cumplido a cabalidad. Pero es hasta hora, cuando esta a punto de graduarse, cuando decide salir y hacerse conocer, "hasta ahora se me presentó la oportunidad con el profesor Juan Manuel y me presenté".

Pero la melodía y el color de su voz no es algo nuevo. Su preparación ha sido la de un monje medieval que se encierra en una biblioteca. "He estado estudiando tecnica vocal en la UCC, y me ha gustado muchísimo".

Pero no parece tener otra inclinación que la música, se muestra dócil y apacible cuando se entrega a la parsimonia de una nota de música colombiana. "Queremos rescatar la tradición, ahora hay mucha música grosera y que no aporta nada". Esa música que el llama "grosera" es precisamente la que no escucha "escucho pop, clásica, baladas, colombiana".


Carlos Leal en un paseo familiar en las costas caribe colombianas. /Foto: Facebook 

Uno de los puntos notables es su pasión por la música colombiana, que fue la que, entonando las notas de Señora Bucaramanga, lo dio a conocer en el teatro "la colombiana (música) es muy bonita, por su música, por su poesía, por su romanticismo". Ahora, después de atolondrar a los estudiantes con su voz, es mas reconocido, lo saludan en los pasillos y escaleras, y esto según el "es llamativo y me gusta".

Evita las notas sórdidas y vulgares y mas bien prefiere escuchar una canción de Ricardo Arjona. Su día es una mezcla de academia y música. Si se le pregunta por un hobbie "interpretar, escuchar.La música para mi es todo", si se le pregunta por una pasión "la música", si se le pregunta por una distracción "la música". La música lo atrapó, lo tiene en sus manos y no lo quiere soltar.

Pero, obedeciendo a la mas representativa ironía, su vida no se la dedicará a la música."Quiero estudiar medicina, la música casi no tiene salida, y siempre me han gustado los temas de la salud".

Sin estudiarla, o sin estudiarla, la música para Carlos se convierte en su eje. Me lo dice mientras termina unas guías de química, y mientras tiene en su mente, la melodía de un Pueblito Viejo.

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